Cartas de Teselia (capítulo 3)

¡Hola mamá!

Tengo buenas noticias. Los entrenamientos de los últimos tres días han dado sus frutos. Yo, Snivy (a regañadientes y a su manera) y Lillipup hemos estado entrenando fuertemente en un lugar llamado Solar de los Sueños, cerca de Ciudad Gres. Al estar allí me daba la sensación de que mi alma se calmaba, que mi mente se aclaraba, y creo que me ha ayudado a pensar con más claridad en estrategias y modos de mejorar. Además, preguntando por la zona he descubierto que el Gimnasio de Ciudad Gres tiene tres líderes: Zeo, Maíz y Millo. Cada uno es especialista en un tipo de pokémon: fuego, planta y agua. Al parecer, tendré que retar al que tenga pokémons de tipo más fuerte que mi inicial, así que supone un inconveniente.

Pero conocí a una chica en el Solar con un problema: al parecer su familia se mudaba a Sinnoh y no podía llevarse a su pokemon. Me dio mucha pena, me dijo que no quería liberar a su Panpour porque lo había criado desde que era un huevo y que no estaba segura de que pudiera sobrevivir en libertad. Así que pactamos que me entregaba al cuidado a Panpour si lo cuidaba. Panpour es de tipo agua, así que mi problema con el líder de Ciudad Gres está solucionado.

También he visitado la Escuela Pokémon. He estudiado un montón de cosas sobre comportamiento y cambios de estado. He aprendido a tratar las heridas, quemaduras, envenenamiento y demás problemas de salud de mis pokémons por mi cuenta, usando lo que tenga a mi alcance, sin depender del Centro Pokémon más cercano. Una suerte, la verdad. Ahora no tendré que preocuparme tanto por si mis pokémons enferman por el camino.

Hoy me he enfrentado al líder de Ciudad Gres. ¿Sabes? Me quedé muy sorprendida con el gimnasio. No sé, me esperaba algo parecido a un centro de entrenamiento, con máquinas de ejercicio o algo así, pero resulta que se asemeja a un restaurante. Me pregunto si todos los gimnasios son así o solo este. Fuese como fuere, me envalentoné a enfrentarme al líder. Los camareros me pusieron a prueba para comprobar que era digna de retar a los líderes, pero no fue demasiado problema. Zeo fue otra cosa.

Snivy no parecía nada contento de no poder luchar contra el líder de gimnasio. Lillipup y Pansear tuvieron que esforzarse al máximo de sus posibilidades. Fue un combate muy duro… ¡Pero gané! Me gané a pulso la medalla Trío. Además, me entregaron una MT, la 83, Avivar. Los esfuerzos de nuestro entrenamiento han dado sus frutos.

¡Mi primera medalla de Gimnasio! Y de las manos de Millo.

Al salir me encontré con Oryza. Es una científica  de Ciudad Gres que, al parecer, es amiga y ayudante de la Profesora Encina. Ella le habló de mí. Me invitó a cenar en el Gimnasio y me habló un poco de cómo la Profesora me había alagado y sobre lo que quería de mí. Al parecer. Está en plena investigación acerca de los sueños pokémon, pero necesita un ingrediente llamado Humo Onírico que expulsan los pokémons Munna y Musharna, que viven en la fábrica abandonada del Solar de los Sueños. Me ha pedido ayuda a mí para que consiga ese Humo, y a cambio me ha regalado la MO01, Corte, y un C-Gear nuevecito. Me ha dejado quedarme esta noche en su casa y me ha enseñado sus máquinas. A papá le encantaría. También he conocido a Trufa, la responsable del Sistema de almacenamiento Pokémon de los  ordenadores de los Centro Pokémon. Es una chica muy maja. Me contó cómo funciona el Sistema en profundidad. Ahora estoy más tranquila cuando envío a mis pokémon al cuidado de la Profesora.

Tengo que acostarme pronto. Mañana tendré un duro trabajo intentando conseguir el Humo Onírico. No quiero herir a ningún Munna o Musharna sin querer. Te contaré cómo me ha ido en mi próxima carta.

Un somnoliento beso desde Ciudad Gres.


-----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Índice

Capítulo anterior: Cartas de Teselia (capítulo 2)
Próximo capítulo: Cartas de Teselia (capítulo 4) el 22-10-12